jueves, 11 de julio de 2019

TALLER CONSTELACIONES FAMILIARES

Por primera vez en el 2019, un nuevo taller de constelaciones familiares abierto a todo público.

En esta oportunidad será en Terra Espacio Consciente, en La California, Caracas.

La logística es la misma que las anteriores.

Para información sobre inscripciones y costos, escribe a nuestro E-mail centroserytrascender@gmail.com.

CUPOS LIMITADOS

martes, 19 de marzo de 2019

TALLER: ENTRENAMIENTO TÁNTRICO PARA MUJERES


...un espacio para sentir y desarrollar tu energía, y reconectar con tu esencia femenina.

Domingo 14 de Abril, en Katara espacios, Chacaíto.

Conducido por:

Edwin De Almeida, masajista tántrico y facilitador para una sexualidad tántrica.

Gisela Galeno Marino, Psicóloga clínica, psicoterapeuta y consteladora familiar.

Información e inscripciones por el +58 (426)1376495

SEXUALIDAD NO ES LO MISMO QUE “RELACIONES SEXUALES”


La sexualidad humana va más allá de la restringida visión que la reduce a la anatomía de los órganos genitales.

Tristemente, la concepción de la sexualidad reducida a la anatomía y funciones genitales, vivida como algo sucio y peligroso, cargada de moralidad, negación y persecución es a la que se ha denominado sexualidad problematizada (c.p. Avesa, 2002).

Esta sexualidad distorsionada es la que genera patologías y consecuencias negativas tanto para el individuo como para la sociedad.

Y comienza desde la concepción, pues implica desde ese momento si bebé es deseado/a o no, si se va a aceptar tanto a bebé como a su sexo (hembra o macho, o niña-niño como nos definimos entre seres humanos).

Cada día de nuestra existencia aprendemos de nuestra sexualidad, hayamos recibido o no educación sexual formal, pues lo aprendemos de lo que vemos, oímos y sentimos de todo lo que nos rodea: caricias, reconocimientos, castigos, juicios, lenguaje corporal, atención y cuidados…





DEFINICIÓN DE SEXUALIDAD





No existe una única definición de sexualidad, sobre todo porque la sexualidadhumana es compleja; sin embargo, una amplia y descriptiva es la que aporta la  Norma oficial para la atención integral de la salud sexual y reproductiva (2004):


“La sexualidad es una dimensión de la personalidad que define el desarrollo como seres sexuados. Está basada en el sexo y las relaciones de género, incluye las identidades, roles, orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva, el amor y la reproducción. Se experimenta en forma de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores actividades, prácticas, roles y relaciones. La sexualidad es el resultado de la interacción de los factores mencionados” (p. 9).






Significa entonces que lo que cada persona vive como sexualidad, no es un hecho de la naturaleza sino el resultado de una historia, una sociocultura individual.

El desarrollo de la sexualidad en todas sus expresiones está íntimamente vinculado a las relaciones interpersonales, la familia, la pareja, así como con el mundo afectivo y emocional. La sexualidad humana integra: placer, afecto, comunicación, creatividad, ética y procreación.

Desde el punto de vista de la salud en positivo Lowen y Lowen (2010), plantean que el organismo como unidad también tiene una salud unitaria que funciona como un ciclo, conformada por la salud física y la salud mental, la salud emocional y la salud sexual:






Una ruptura en la unidad del ciclo trastornará la integridad del organismo y afectará la salud en todos los niveles. El efecto es siempre total.

La salud emocional se refiere a tener “una plena posesión de nuestras facultades, y la plena gama de nuestros sentimientos” (p. 44). Por supuesto, esto incluye la capacidad de sentir y expresar plenamente nuestra sexualidad, y la capacidad de experimentar el gozo de esta expresión.

Es decir, la salud sexual es la capacidad para el placer y el gozo de la vida. Es el vigor que se expresa y se celebra abiertamente. ¡Es estar vibrantemente viva/o!

El sentido del yo de una persona, dice Lowen, se asienta sobre su sexualidad; la ansiedad, la culpa o inseguridad sexual, debilitan ese asiento y minan la fuerza de nuestro yo.

Los genitales son sólo los órganos por donde se descargan los sentimientos sexuales de la persona.

En conclusión, las relaciones sexuales representan la experiencia física humana más atractiva, deliciosa, poderosa, estimulante, renovadora, energética, íntima y con la mayor capacidad de afirmación, unión y recreación (Walsch, 1997).

Pero tan espectacular experiencia pasa por una vida espectacular, aquella que se da viviendo una sexualidad saludable, consciente, sentida, libre…¡y en constante celebración y placer!


Referencias bibliográficas:
AVESA. (2002). Orientación individual en salud sexual y reproductiva adolescente. Caracas, Venezuela.
Lowen, A. y Lowen, L. (2010). Ejercicios de bioenergética. Barcelona, España: Sirio.
MINISTERIO DE SALUD Y DESARROLLO SOCIAL (2004). Norma oficial para la atención integral de la salud sexual y reproductiva.
Monroy, A. (2003). Nuestros niños y el sexo. México: Pax.
Walsch, N. (1997). Conversaciones con Dios, tomo I. México: Grijalbo.